Un día a la vez...

La historia anterior de "Bienvenido a Holanda" describe perfectamente como uno se puede sentir al enfrentar  una situación como la nuestra, que nuestra bebe haya nacido con una condición que de alguna manera la hace ser diferente...creo que luego de llegar a un embarazo a termino y lograr que todo salga bien, no esperamos o no tenemos en la cabeza que todo pueda cambiar de un momento a otro...pero situaciones como estas son un abrir de ojos que sí, lo hacen a uno ver que cosas como estas pasan y pasan a diario...lo hacen a uno consiente de tantas cosas en la vida...en lo personal he aprendido a valorar lo realmente importante y dejar a un lado las cosas que no me van a ayudar o aportar algo positivo en mi diario vivir...

Estos meses no puedo mentir en decir que han sido fáciles, la verdad han sido como una montaña rusa, con sus subidas y sus bajadas emocionales, pero lo que sí puedo decir es que tomada de la mano de Dios ha sido muchísimo más fácil de lo que alguna vez creí...y he comprobado que es tan cierto, "Dios nunca nos va a mandar algo que nuestras fuerzas no puedan resistir"

Al principio no podía entender como esto nos podría estar pasando, pero hoy he aprendido a ver todo tan diferente, mi vida no sería lo mismo sin mi bebita linda, Ana Victoria trajo a mi vida algo tan especial, y como siempre digo hasta el día de hoy y lo diré siempre, siempre, siempre es que el despertarnos todos los días con una sonrisa de ella, es un regalo indescriptible de parte de Dios, y le doy gracias infinitas por habernos escogido como los padres de esta princesita que más allá de lo que un día pude creer es una bendición inmensa...

Cada hijo es tan especial y único a su manera, mis hijos son tan diferentes, pero cada uno ha aportado a nuestro hogar, y a mi vida muchísima felicidad, y así como me he gozado hasta ahora cada etapa de la vida de Joaquin, de Paulina; ahora lo estoy haciendo con Ana Victoria, aprendiendo todo lo que ella hasta el día de hoy siendo una bebe me ha enseñado porque realmente es una luchadora y como lo dice su nombre, su vida ha sido y será por siempre una " VICTORIA".

Y así que puedo decir que estoy aprendiendo a conocer Holanda, y a disfrutar esos rincones maravillosos que me puede ofrecer...nunca dude desde que aterrice aquí que esta prueba de amor sería maravillosa...así que estando todos juntos podremos y aprenderemos a disfrutar de cada una de las maravillas y bendiciones que estando en Holanda podremos conocer...teniendo por seguro que agarrados de la mano de Dios nunca estaremos solos!